martes, agosto 28, 2012

ABOUT ME, O EL LARGO POEMA SOBRE MI


50 años y 6 kilos de más.
Amo la marraqueta fresca con palta (sin limón).
Soy escéptico por convicción y doctrina, empero no desconfiado.
Por sobre todas las cosas admiro a Gabriela Ballacey Frontaura; mi madre.
Trato de usar solo camisas de algodón.
Ateo, pero de un tiempo a esta parte, llano a que “algo hay”.
Admiro a los que trotan y a los que tratan.
Creo en el perdón y las disculpas.
Me entusiasmo con entusiasmo. Me aburro sin aviso.
Confieso que me gustaría volver a tener chasquilla.
Lloro con algunas películas y ya dejé de incomodarme.
Si existe un más allá ojala haya alpargatas.
Me gustan las manos que caminan juntas por la calle
No voy a reírme, voy a que me hagan reír.
Comería camarones hasta de desayuno.
Fanático de Les Luthiers y la U.
Me gusta escuchar la voz de una mujer cuando se cuenta a si misma.
Cocinero, pero no parrillero.
Alguna vez mi padre también se llevó mis sueños.
Estudié hasta donde quise y me arrepiento.
Vocación de padre es lo que más me define.
Ronco y no es intencional.
Nací pocos días después de Gagarin orbitara la tierra por primera vez.
El chocolate bitter puede ser un vicio.
Cercano a los corazones en pena. A los que les duele hasta la manera de caminar.
Conversar de “uncuantohay” toda la noche es esperable.
Odio el Tofu.
Cronista de la pequeña vida, esa que duerme casa adentro.
La tontera me saca de quicio.
Echarme a mirar el techo es recurrente.
Cada día que pasa sé menos.
Amo Buenos Aires y Valdivia.
Nunca creí necesitar terapia, hasta que me descubrí hablando solo.
Tenía fobia a los gatos, ya no.
Fumo Parisiennes y prefiero el Syrah.
Alguna vez viajaré a Estambul.
Más de alguna vez fui el Rey de los huevones.
Melómano inquieto y perenne.
Manhattan de Woody Allen me conmueve.
Descubrí que las lentejas con curry son maravillosas.
No creo en el Tarot, pero estoy dispuesto a desdecirme.
Me gustan los parques y los escaños.
Carezco de resistencia al cambio.
Las remodelaciones de la casa me descomponen.
Muchas veces me sumerjo en hoyos negros.
La mayonesa ojala casera.
Me gusta conocer gente.
Jamás cuelgo los cubiertos mientras como.
Una terraza frente al mar siempre es necesaria.
No tolero la tensión con soltura.
Coleccioné postales, cajetillas de cigarro y datos inútiles.
Jack Daniels, Glenfiddish y cualquier irlandés.
Siempre necesito tiempo para elaborar mis respuestas.
Me aburre la frivolidad.
El minimalismo en todo, me da frío.
A veces no me sale el habla y otras hablo hasta por los codos.
Comer porotos verdes es mascar pasto.
Schwenke & Nilo forman parte angular de mi soundtrack.
Los teléfonos ocupados me dan urticaria.
Churrasco Palta Mayo Ají Verde en frica.
Me cargan las estrategias cuando se trata de seducir y encantar.
Los Beatles sin duda, más también los Stones.
Repito historias muchas veces.
Me gustan los chistes fomes.
Pasé un rato largo afectado de Nihilismo.
La poesía es mi alimento y mi todo.
Cuatro hijos notables y con las cosas claras.
Requiero más tiempo del que dispongo.
Hace mucho que no canto la canción nacional.
Me carga la palabra patria en la boca equivocada.
Fui fanático de Música Libre e Isabel castro.
Mis principios duran hasta el final.
Puedo ser muy antipático, pero pocas veces.
Soy de tocar, de abrazar, de hacer sentir el afecto.
Desde este instante soy hincha de Vasti Michel.
Me encanta la comida Thai.
Rara vez pierdo la paciencia.
Tuve el privilegio de ver a Luca Prodán en vivo.
No me hago problema en revisar mis ideas, creencias y convicciones, sobre todo los Sábados.
Duermo siesta siempre que es posible.
Cuando descubro una canción puedo escucharla hasta el hartazgo ajeno.
Juro que me he equivocado reiteradamente.
Pasé de largo por el Festival de la Una.
La mayoría de las veces puedo solo.
Fui, soy y seré músico frustrado, empero asumido como tal.
Me suponía estructurado. Ahora recojo escombros.
Ya supe que puedo traicionar y jode como cicatriz de clavo oxidado.
Cobijo una antena siempre alerta contra los malos presagios.
Cuando tenía 6 años era Lennon con una cuchara de palo como micrófono.
Soy de los que dan puntadas sin hilo.
No te como interiores.
Cuando beso, no busco tan solo un labio.
En el afán de ser dejé de estar.
Hace nada supe que mi arcano es el diablo.
Me inquieta la gente que se deja querer, pero no quiere.
No le doy importancia al orgullo como trinchera.
Yo he negado tres veces…y qué?.
Todo me sienta bien, salvo la risa inoportuna.
Pizza de mozzarella y albahaca.
Se tanto de carpintería como de la reproducción de los ornitorrincos.
La desobediencia me asombra de pura cobardía.
Tengo un montón de placeres culpables.
Uso anteojos desde los 5 años y no sé como es el mundo sin ellos.
Un par de buenas tetas son siempre bien recibidas.
Odié, odio y odiaré a Pinochet, no lo puedo evitar.
Nunca logro caer de pie.
Sueño despierto y hablo con mi amigo imaginario.
Me gusta perder el tiempo.
Helado de vainilla con frutillas salteadas en mantequilla y pimienta entera.
Los que tropiezan me convocan más que los incólumes.
Tropiezo conmigo a cada rato.

1 comentario:

elescaramujo dijo...

siempre está bueno (auto) definirse. que nadie se lleve un chasco, esto es lo que uno es.
me gustó, hace rato que no pasaba por estos lares. besos, Carlos.